El Páramo de Puracé se encuentra en todo el corazón del macizo colombiano. Sus amplias llanuras, acantilados y montañas son el hogar de un sinnúmero de especies. En este artículo hablaremos sobre la biodiversidad y lugares más representativos de este lugar.
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El Parque Nacional Natural Puracé es una de las áreas protegidas más conocidas del país. Declarado en 1979 como Reserva de la Biósfera de la Unesco, y con una extensión de 830 kilómetros cuadrados, este lugar es el nacimento de los ríos Cauca y Magdalena.
Su área comprende parte de los municipios municipios de Puracé, Almaguer, Sotará, San Sebastián, La Plata, La Argentina, Isnos, San Agustín y Saladoblanco. En lo más alto de este parque se eleva el Volcán Puracé, con 4650 metros de altura sobre el nivel del mar.
¿Cómo llegar al Páramo de Puracé?
Existen 3 rutas principales para llegar al Puracé. La primera es desde Popayán pasando por Coconunco; la segunda es desde el municipio de Isnos en el Huila y la tercera desde La Plata, pasando por Santa Leticia. En los 3 casos es posible atravesar el páramo en su totalidad.
Una vez en el páramo, se pueden realizar caminatas de forma libre o contratar servicios de guianza para acceder a ciertos lugares. En cualquiera de los casos, los paisajes y la alta biodiversidad de la zona brindan una experiencia sobrecogedora.
A continuación nombraremos algunos de los lugares más reconocidos y la biodiversidad que habita en ellos.
Termales de San Juan
La entrada a estos termales es un sendero de piedra rodeado de arbustos y plantas como la Passiflora fimbriatistipula. Al llegar a los termales propiamente dichos puede verse cómo emana agua azufrada de la tierra. Hay senderos de madera que permiten hacer un circuito por el lugar. Allí es común encontrar huellas de danta y observar patos andinos (Anas andium). El paisaje es una mezcla de arbustos, arbustos y frailejones, en un arreglo mezclado con rocas y afloramientos termales.
En las áreas aledañas pueden ser observadas las especies de aves características del bosque altoandino, como el trogón enmascarado (Trogon personatus), o el colibrí aterciopelado (Lafresnaya lafresnayi).
Laguna de la Danta
También llamada Bebedero de las Dantas, se encuentra a borde de carretera. Es un pequeño represamiento de agua helada, donde ocasionalmente se avista la danta de montaña (Tapirus pinchaque). Algunas golondrinas frecuentan también el lugar, volando a ras de la superficie del agua. Los arbustos aledaños a la laguna son el hábitat de la tángara escarlata (Anisognathus igniventris) y el gorrión cabeciblanco (Atlapetes pallidinucha).
Cascada El Bedón
Al igual que la Laguna de la Danta, también se encuentra a borde de carretera. Lleva su nombre por el Río Bedón, que desciende por la montaña para convertirse luego en el Río Aguacatal. La cascada tiene un caudal considerable y está rodeada de arbustos, donde en su orillas predominan especies como la rascadera (Gunnera sp.)
Valle de frailejones
Este es un valle inmenso, dominado principalmente por frailejones, como Espeletia hartwegiana. En esta zona se ha registrado con frecuencia la presencia de oso de anteojos (Tremarctos ornatus). A borde de carretera se puede ver una amplia variedad de orquídeas y aves, entre las que se destaca el chamicero cejiblanco (Hellmayrea gularis) y el arañero citrino (Myiothlypis luteoviridis). El paisaje de este valle está interrumpido por el cauce del Río Bedón, y al fondo se escucha esporádicamemente el sonido de bandadas de loros que cruzan el valle.
Volcán de Puracé
Este es probablemente el lugar más frecuentado por los visitantes del parque. Se eleva hasta los 4650 msnm y su acceso es principalmente por el sector de Pilimbalá, donde hay también termales y servicio de hospedaje. En estas laderas se observan especies como el colibrí paramuno (Aglaeactis cupripennis), el inca alihabano (Coeligena lutetiae) o el cometa coliverde (Lesbia nuna). Hay también senderos centrados en la observación de orquídeas nativas
Piedra del cóndor
Este es un lugar donde los guías y habitantes de la zona alimentan al cóndor de los Andes (Vultur gryphus). A cierta hora del día, los cóndores descienden de los acantilados donde permanecen la mayor parte del tiempo, para sobrevolar el lugar y aterrizar en algún momento sobre la piedra donde se alimentan. Este lugar ha sido bastante frecuentado en los últimos años por fotógrafos y turistas interesados en el avistamiento de aves.
Por supuesto hay muchos más lugares y especies de las mencionadas en este post. Esta es solo una recopilación de los lugares más frecuentados, para conocer un poco mejor este parque y fomentar su protección.
Lamentablemente, en los últimos años ha habido reportes de incendios en el parque y zonas cercanas, provocados con el ánimo de expandir la ganadería en estos territorios.
Este artículo es una invitación a concientizarnos sobre los beneficios que nos brindan los páramos, y la necesidad de cuidar zonas que ni siquera han sido estudiadas completamente. Prueba de ello es la descripción reciente de dos nuevas especies de orquídeas, denominadas Lepanthes kokonuko y Lepanthes jucas, encontradas en el PNN Puracé.